Parador de Toledo

Un sitio espectacular y en una ubicación inmejorable.Muy atentos en el servicio en la cafetería.
Lamentablemente nos dieron,yo creo,que la única habitación que no tenía terraza.Daba a la piscina y no tenía vistas del el casco histórico de Toledo.A pesar de haberles comunicado con antelación, al hacer la reserva,que el motivo de nuestra estancia era la celebración de las bodas de plata,no hubo posibilidad de cambiar la habitación,porque,según nos dijeron,estaba todo lleno.
A pesar de todo esto,ha sido una experiencia muy agradable.

Un lugar idílico. La ubicación es perfecta. Vistas panorámicas de Toledo, una auténtica maravilla.

En cuanto al alojamiento: habitaciones amplias con bañera y cama excepcionalmente grande. Todo está muy limpio y el interiorismo está adoptado a Toledo y sus artistas. Muy correcto y acogedor.

En cuanto al restaurante: desayuno buffet muy completo, es de agradecer la carta ampliada de productos calientes (churros y porras entre otros). La cena a la carta muy ricas todas las elecciones. Aspectos a mejorar; que la comida salga caliente (llegó templada a la mesa pero aun así muy bueno)

Hemos pasado dos noches, he de decir que la habitación nos ha parecido muy buena, amplia y con bañera de hidromasaje.
No puedo decir lo mismo del desayuno ni la cafetería.
Empezando por el desayuno de todos los paradores que he visitado he de decir que es el más pobre que he visto en Paradores, aunque correcto.
Sin embargo la cafetería es un.punto que deben mejorar y mucho. Anoche bajamos para cenar algo ligero y lo primero el ruido....no parece una cafetería de parador mucho ruido y camareros sin experiencia, y la cena un auténtico horror, me gusta todo y no fui capaz de comer lo que pedimos.

El sitio espectacular, ubicado en zona muy bonita, con vistas increíbles. No le doy 5 estrellas porque en los restaurantes como tenían tantos huéspedes sentimos que estaban agobiados y ésa sensación nos la transmitían.
Especial mención al chico de la piscina, Rodrigo, muy atento a todo lo que pasaba a su alrededor, a demás de ser muy amable

El hotel es espectacular: rústico, muy cuidado y con las mejores vistas de Toledo tanto de día como de noche.
La cena de nochebuena es una pasada: alta calidad y sin escatimar en detalles. El desayuno de 10, no le falta de nada.
Personal muy amable que te hacen la estancia muy agradable.
No tiene ninguna pega

Es muy bonito y el personal muy amable y dispuesto desde recepción hasta el comedor, cafeteria, en fin todos y aunque no pude bajar, tienen hasta una piscina muy bien ubicada, te dan hamaca y toalla incluidas. En el restaurante se cena muy bien, los Paradores tienen una carta suficiente en verano. Lo único que fastidia un poco en la cena en la terraza son las avispas que merodean los platos, pero la vista de la ciudad histórica de Toledo como fondo es excepcional.

Un sitio de ensueño. Por poner un "pero" es que es necesario el coche para ir a la ciudad. Aún así merece mucho la pena. Las vistas son fabulosas, las habitaciones son espaciosas y muy chulas, y el personal es inmejorable, cuidando cada detalle. También cenamos allí todas las noches y el personal del restaurante también es fantástico y la comida exquisita.

Nos hemos alojado mi pareja y yo tres noches. Que decir que todo magnífico. Cama muy cómoda. Habitación muy limpia. La piscina genial. Usan un tipo de agua salada en vez de cloro y es muy agradable. Cenamos también una noche en el restaurante y tomamos algo en la cafetería terraza. Todo de 10. Muchas gracias.