Restaurante Sonia L´Obrer

Ha sido nuestra primera visita y una experiencia genial. El personal es muy atento y servicial. La terraza es acogedora y nos ha permitido disfrutar de un día primaveral con una comida estupenda. Pedimos el embutido a la brasa (espectacular) y una ensalada, para reservarnos para el arroz al horno, que estaba buenísimo. Los postres caseros no hay que perdérselos y la carta de vinos es muy completa. Volveremos sin duda.

Un sitio súper agradable para ir con tú pareja o familia. La comida espectacular, todo casero y echo con mimo. El trato recibido por parte de los camareros y camarera, hacía mucho tiempo que no lo veía, de quitarse el sombrero!!! Bueno, no... Buenísimo!! Nos han echo sentir cómo en casa!!! Repetiremos, seguro.

Es un restaurante estupendo para ir a comer después de pasar la mañana en Guadalest. Se puede ir andando de un pueblo a otro.
El personal muy amable y servicial en todo momento.
La comida buenísima, especialmente la olleta de blat que es el plato típico de la zona.
Muy recomendable, volvería sin duda.

Todo buenísimo!
Reservamos aquí de casualidad porque el que solemos ir estaba lleno dias antes, y vimos que tenía buena puntuación y nos apetecía probarlo.
Pues el arroz estaba increiblemente bueno. Cogimos el menú degustación que entraban 4 entrantes de la casa y elegimos arroz al horno de principal. Todo en su punto, el arroz entero como nos gusta y tostadito por debajo, y con cantidad de carne y condimento, creo que es el mejor arroz al horno que he comido fuera de casa 😁.
El entrante de merluza y aguacate con vinagreta por arriba, no llama la atención y cuando lo pruebas te dan ganas de comerte 3 más! La tempura en su punto y buena ración, la lasaña de berengena es lo único que creo que le faltaba sabor, muy buena pinta pero el sabor… regular…. Te dicen que es de pescado y te lo crees…. Y las croquetas y saquito de 🧀 con 🍅 buenísimo también.
Muy recomendable, y sin duda a la próxima volveremos a este. No volveremos al nuestro habitual porque este el arroz le ha superado.
Con menú, bebidas, pan etc.. unos 30€ por persona 😊.
Tiene parking propio para poder aparcar, solo que si llegas a hora punta, pues ya esta lleno, pero genial que tengan este servicio.

Todo un espectáculo, cuando te traen la olleta de blat, alucinas, la pruebas y tocas el cielo. Un servicio encantador, atento y cercano. Cuando acabamos la olleta, vino la chica sonriendo con los segundos, con unas raciones que ya no sabíamos cómo nos las ibamos a comer y cuando pruebas ese conejo al horno, tan bien acompañado y la paletilla de cordero acompañada también con esa guarnición de categoría... No puedes evitar hincarle el diente. El postre también cayó, una tarta de queso casera deliciosa. Cuando vimos la cuenta no nos lo podíamos creer, un precio muy ajustado para los manjares y cantidades que habíamos disfrutado. Nos hemos ido que no cambiamos en nosotros mismos de tanta satisfacción. Altamente recomendable, sólo puedo deshacerme en halagos, me quito el sombrero.

Buena y variada carta, 2 opciones de menú del día con diversos platos a elegir, calidad en sus platos, local bien climatizado con calefacción central y chimenea, con parking, personal atento.
¡MUY BIEN!

Las cheletas de cordero a la brasa están 🤤 Una imagen vale más que mil palabras. 😉😁 El flan de almendra también está muy rico 😉🤤

Sitio el cuál recomiendo encarecidamente. Tanto la comida, el servicio y atención al cliente excelente. Hacia tiempo que no encontraba un sitio tan acogedor.