Puerto de Palombera

Espectaculares vistas y posibilidad de tener algún encuentro animales salvajes con relativa falicidad (corzos, zorros, jabaliés, etc.) En uno de los apartaderos, vino a saludarnos un zorro que se notaba estaba muy acostumbrado a que le den comida, y ya de salvaje tiene poco. Aun así fue una gran sorpresa ver un animal salvaje tan de cerca.

Enclave privilegiado. Paisaje único.
Ideal para deportes de nieve en época de invierno. Raquetas, trineo, ...
Ideal con niñ@s para disfrutar de la nieve.
Imprescindible informarse de la previsión meteorológica y del estado de la carretera, ya que es un puerto de montaña y no siempre el acceso está habilitado.
Recomendable madrugar para garantizarse un aparcamiento seguro, ya que no existe una zona amplia habilitada para aparcar y la gente acaba aparcando de mala manera. Se suelen generar atascos por el mal estacionamiento, por lo que es aconsejable dar por terminada la jornada cuándo empieza a haber mucho lío en la carretera.

Una parada esencial en nuestra ruta desde Cabuérniga a Fontibre. Un paisaje precioso, con vacas, caballos y nieve. Ideal para estirar las piernas o hacer una ruta.

Uno de los puertos más bonitos de Cantabria sin lugar a dudas, especialmente por la vertiente de Saja, aunque la de Espinilla también da mucho juego. El asfalto está estupendo por ambas vertientes.
CUIDADO CON EL GANADO, que en verano pasta a sus anchas y se mete en la carretera pocos km antes de coronar el puerto.

Tanto la subida al puerto, desde Santander, como arriba, podemos ver un paisaje precio. Si lo pillamos con nieve será aun más impresionante. Es un paseo para tomarlo con calma y tiempo, ya que nos induce a pararnos cada poco a admira el paisaje.

La carretera que sube es absolutamente maravillosa, circulas entre árboles y cuando la carretera abre , tienes unas vistas increíbles.

Un puerto muy recomendable tanto para recorrerlo en moto como en otro vehículo.
Mucho cuidado con el ganado que cruza la carretera.

Un recorrido sinuoso nos acerca desde la meseta al río Saja, con un paisaje impresionante que adquiere un colorido insuperable al llegar el otoño. Ideal para contemplar el entorno, practicar el senderismo u otros deportes o captar las imágenes.