Petit Hotel de Riu

Nos alojamos en este hotel con un bebé de 3 meses por pensar que sería un sitio tranquilo y familiar por las buenas críticas, pero tuvimos un incidente muy grave que ya tratamos con los dueños por el cual estuvimos a punto de llamar a la policía (sin entrar en detalles por haberlo discutido ya con ellos, sólo comentar que estuvimos en plena ola de calor, al mediodía y con un bebé de 3 meses, en la calle, sin poder entrar al hoteln durante más de 1h, a pesar de estar alojados allí)
Solo a modo de aviso para los que quieran ir:
1- tienen horario de entrada y salida del hotel incluso cuando ya estáis alojados, por lo que pueden cerrarte la puerta con cerrojo a las 13h y tu no poder entrar a tu habitación a coger nada de tus cosas
2- ellos deciden cuándo hace calor y cuándo puedes poner el aire acondicionado ( si creen que no hace calor, lo apagan,aunque sea por la tarde y fuera haga 35°)
3- no te quedes muchas horas en tu habitación, porque según ellos no puedes quedarte todo el día en tu habitación
4- cuidado con la limpieza los días que no son fin de semana y no hay mucha gente en el hotel.
Espero que pueda ser útil esta opinión para los que se planteen ir.

Hemos estado muy a gusto en este hotel alojados 3 noches con nuestro peque de 2 meses.Tanto Imma, Joan como Montse nos han acogido de maravilla. Entramos una hora antes de la hora del check in (las 16h) y pese a ponernos alguna pega por el horario de la entrada, ya que pone un cartel en la puerta, al ir con nuestro bebé de dos meses nos dejaron entrar al vestíbulo.
En cuanto a la habitación, la cama es bastante grande y cómoda y no se escucha apenas ruido de otras estancias. A mejorar, la tv es muy pequeña y la ducha tienes que ir con cuidado si no quieres inundar todo el baño (un pequeño zócalo quizá lo resolvería). El servicio de limpieza adecuado. El desayuno muy completo, pero se podría hacer algo más variado (tienen opción dulce o salado) y siempre es el mismo desayuno, aunque los embutidos son de gran calidad.
Destacar la amabilidad de los anfitriones, los cuales nos recomendaron actividades para hacer con el peque.

Hotel con encanto en el pequeño pueblo de Riu de Cerdanya. Cerca de Bellver. Habitaciones perfectas. Aire acondicionado. Limpias y cuidadas. Desayuno de 10 abundante y bien servido. La única pega es q solo sirven de cena un único menú bastante caro y único. No hay posibilidad de otra cena y no hau servicio de bar. En el pueblo no hay ni un bar con lo que para todo tienes que coger el coche.

El Petit Hotel de Riu, es sin lugar a dudas un lugar muy especial.
Es el esfuerzo y la dedicación de dos personas que lo han dado todo en estos años para cumplir su sueño, un pequeño hotel, acompañado de una oferta gastronómica hecha con mimo y corazón.
En estos tiempos, donde las "grandezas" lo superficial y el marketing están a la orden del dia, reconfortante encontrarte lugares llenos de alma y silencio donde una simple conversación puede convertirse en el mejor de los regalos.
Gracias Joan e Inma por hacer una Cerdanya, más humana, sencilla y única.
Os deseamos lo mejor!
Os lo merecéis...

Nos habríamos quedado más días. El lugar muy tranquilo y bien comunicado a la vez, el hotel muy bonito y cuidando los detalles. El trato inmejorable y el desayuno correcto.

Encantador hotel, hemos estado 4 noches, la quietud que se respira, el entorno, unos desayunos pantagruélicos, pero sobre todo, la amabilidad de Inma y Joan, te hacen sentir como en casa, son verdaderos anfitriones. Volveremos, sin ninguna duda.

Lindo paisaje...

Muy bien las habitaciones la cena de 10 la amabilidad insuperable