MARDENIT

Teníamos buenas expectativas, pero las cumplieron con creces. Un lugar tranquilo donde desconectar. Limpieza 100%, amabilidad y detallismo incluso con el perro.
Cena y desayuno muy completos.
Lo recomendamos al 100% y seguro que volveríamos a visitarlos.
Saludos

Fabulosa estancia de dos noches en el Mardenit. Se cubrieron las 5 estrellas en cada uno de los ingredientes para "cocinar" un viaje prácticamente ideal. La acogida por parte de Ruben y Magda genial, con calidez, haciéndote sentir como en casa. Las instalaciones muy limpias, decoradas con una exquisita sencillez, a la vez que cómodas y prácticas. Los desayunos, realizados todos con productos naturales y autóctonos, deliciosos. El SPA, un lujo a nuestro alcance. Los consejos de Ruben a la hora de proponer una ruta distinta cada día a la medida de nuestras posibilidades e intereses dieron en la diana. Y mi perrita Coco disfruto también al 100%. En definitiva, para repetir y para recomendar sin ningún atisbo de duda. Gracias a los dos!!!

Nos fuimos a pasar un fin de semana y nos decidimos por un paquete de actividades que ofrecían.La habitación espectacular con unas vistas inmejorables.Los desayunos excelentes con productos de la zona en especial nos encantó un bizcocho de almendras que hace el padre de Rubén en el horno.Visitamos la Bodegas Gutiérrez de la Vega y fue toda una experiencia conocer y escuchar las anécdotas de Felipe.
Sin lugar a dudas es un hotel muy recomendable en el cuál también se puede disfrutar de su jacuzzi y barbacoa en la terraza de arriba.¡Volveremos porque la estancia y el paraje nos gustó mucho!

Ha sido un fin de semana de lo mas aprovechado. Mar de Nit se define muy bien como Rural y Moderno. Las instalaciones tienen todo lujo de detalles que sorprenden por su buen gusto.
Rubén ha sido muy amable y atento. Nos ha informado, aconsejado y nos ha prestado un servicio de 10. La comida ha sido espectacular, una cena con aroma y gusto marroquí, y unos desayunos insuperables, con en detallazo de tener gran variedad sin lactosa.
Lástima que solo fueron 2 noches.

La sensación que tienes tras finalizar tu fin de semana es que tienes que volver. Una estancia de unos días se convierte en una experiencia gracias a la orientación de dueño del alojamiento, Ruben.
Sabes que acertarás de nuevo porque tras conocernos nos fue orientando.
Lo recomiendo sin dudarlo.

Hicimos una escapada de fin de semana en pareja en la habitación Santa, con un pack que incluía cena árabe, visita a bodega, jacuzzi y cena en restaurante. La experiencia ha sido una pasada en todos los aspectos. La habitación es cómoda, decorada con buen gusto y con una terraza con magníficas vistas al monte. El trato del personal es exquisito, muy cercano y agradable, se implican en que estés a gusto y lo consiguen. Han tenido un detalle detrás de otro, desde la bienvenida, el desayuno y otras cosas que es mejor vivir y que te sorprendan. Los packs de experiencias nos parecen una opción perfecta para descubrir esta zona de la Marina Alta sin preocuparte por organizar el viaje, confiando en el buen criterio de Rubén. Muy recomendable.

Nos ha encantado la experiencia. Vistas increíbles a la montaña, atención estupenda y cuidada al detalle desde el momento de la reserva, productos de desayuno locales y sabrosos, un colchón extra cómodo, todo genial. Sin duda repetiremos. Nos dio mucha pena dejar el lugar así que lo recomendamos por completo.

Excelente y acogedor hotel. Servicio muy cuidado. Ideal para un relax, recargar pilas y acabar con el estress. Pongo en valor las sugerencias de Rubén para hacer rutas para disfrutar de impresionantes vistas de monte y mar. Destacar sus consejos para comer y cenar en lugares con encanto, buen servicio y la mejor gastronomía de La Marina Alta. Para enmarcar el desayuno de Mardenit servido en la terraza y la relajante experiencia del jacuzzi.